Una cartera de activos bien compensada es como un buen equipo de fútbol. Tendremos diferentes tipos de activos (futbolistas), cada uno con unas características propias diferenciadas (descorrelacionadas) que conforman un todo (equipo).
Para cada momento de mercado (partido) buscamos la mejor combinación posible de activos que nos dé la mejor relación entre rentabilidad y riesgo. Para ello, nuestra cartera siempre estará compuesta por una cartera de activos en tendencia alcista (los jugadores en mejor forma para cada demarcación) que en conjunto se complementen entre sí (jugadores con habilidades distintas).
De esta forma, en nuestro fondo de inversión tenemos hasta 18 tipos de activo (plantilla) bien diferenciados.
Nuestro equipo gestor (cuerpo técnico) es el encargado de combinar y estructurar la cartera en base a una estrategia de gestión (sistemática de trabajo) fruto del estudio y la experiencia durante más de 20 años.
De esta forma, para cada momento de mercado, diseñamos una cartera lo más consistente y competitiva posible (equipo titular y suplentes).
Portería:
Liquidez, es un activo que aporta al equipo máxima seguridad y su principal virtud es la de preservar el capital. Además, nuestro portero maneja bien los pies y es capaz de dar soluciones al equipo en momentos de estrés.
Defensa:
La línea defensiva la conforman actualmente el oro, la renta fija del gobierno americano, la renta fija de gobiernos europeos y la renta fija corporativa de alta solvencia. Son los encargados de dar solidez al resto del equipo defendiendo la cartera ante posibles ataques que puedan surgir en los mercados.
Medios defensivos:
Nuestros dos centrocampistas de corte defensivo son los llamados activos alternativos líquidos y la renta fija emergente. A estos jugadores les pedimos, además de solidez, una mayor rentabilidad que a la defensa. Son los encargados de enlazar con la parte atacante de la cartera aunque para ello corran determinados riesgos.
Medios ofensivos:
Los titulares en esta demarcación son los activos del sector inmobiliario tanto de países asiáticos como de países desarrollados. Se caracterizan por tener rasgos cercanos a la renta fija combinados con aires de renta variable.
Delanteros:
Son la alegría de la cartera, asumen riesgos (regates, últimos pases, chuts) a cambio de buenas rentabilidades (goles). Una combinación de renta variable europea y americana conforman nuestra línea de ataque actual.
El resto de la plantilla está constituida por: bonos ligados a inflación, renta fija corportiva europea grado inversión, renta fija high yield europea, renta fija high yield americana, renta variable latinoamericana, renta variable asiática y renta variable japonesa.
Nuestro objetivo final es maximizar la relación entre riesgo y rentabilidad a medio y largo plazo. Para ello, lo más importante es formar un buen equipo y no tanto tener a los mejores jugadores pues creemos firmemente que “un buen jugador puede hacerte ganar un partido, un buen equipo gana campeonatos”.
Fotografía: , Adelou Eletu, Unsplash.com